NUESTRA EMPRESA EN MÉXICO

La fundadora de esta empresa llegó muy joven a México y adquirió la costumbre de obsequiar alfajores a las amigas que la invitaban a casa para celebrar cumpleaños, primeras comuniones, aniversarios. La aceptación y los comentarios de sus amigas fueron excepcionales, en todas partes la llenaban de elogios. Luego algunas de ellas empezaron a encargarle pedidos, fue así como comenzó un pequeño negocio que fue creciendo sin parar hasta desbordar la cocina de su casa por lo que decidió constituir una empresa en toda regla; eso sí, que mantuviese los procedimientos de fabricación tradicionales y la calidad de los ingredientes. Actualmente cuenta con clientes, los más grandes del DF, y consumidores particulares que son atendidos con esmerada gentileza y flexibilidad.